Lucas como motorista. En una ocasión, Lucas llegó al edificio de la Policía Nacional y dijo:
-«Quiero supervisar el tráfico en Guatemala. Motorista, déme su moto.»
Y el General salió a las calles disfrazado de motorista.
De pronto, un vehículo pasó a su lado a toda velocidad. Inmediatamente Lucas encendió la sirena y empezó la persecución. Por fin le dio alcance y le dijo con voz de autoridad:
-«¡Su licencia, por favor!»
El chofer pensó: «A éste es fácil sobornarlo» y le dio un billete de cinco quetzales.
Lucas se quedó viendo la efigie del billete e inmediatamente se lo devolvió y
le dijo:
-«General Justo Rufino Barrios ¡Discúlpeme! Puede continuar su camino.»
—o—
Lucas como motorista. Este es humor netamente guatemalteco. Explicar un chiste le quita gracia, pero para hacerlo comprensible a nuestros visitantes de otros países: Lucas es un expresidente de Guatemala que ha sido objeto de tantos chistes que podría escribirse un libro de ellos. En el billete de cinco quetzales aparece la efigie del general Justo Rufino Barrios.